
DESCARGAR GUIA
PARTE DEL MATERIAL
La capa de ozono actúa como un potente filtro solar evitando el paso de una
pequeña parte de la radiación ultravioleta (UV) llamada B que se extiende
desde los 280 hasta los 320 nanómetros(nm).
La radiación UV-B puede producir daño en los seres vivos, dependiendo de su
intensidad y tiempo de exposición; estos daños pueden abarcar desde
irritación a la piel, conjuntivitis y deterioro en el sistema de defensas.
Los principales agentes de destrucción del ozono estratosférico, son
mayormente el cloro y el bromo libres, que reaccionan negativamente con
ese gas. El cloro, en las proporciones existentes, debe su presencia en la
atmósfera a causas antropogenias, especialmente desde la aparición de los
clorofluocarbonos (CFC) sintetizados por el hombre para diversas aplicaciones
industriales.
0 comentarios:
Publicar un comentario